Sitio histórico en el abandono
El Portal de Valderrama, una esquina emblemática en el Centro Histórico, ubicada en la intersección de las calles 15 de Mayo y Luis Pasteur, ha pasado de ser un sitio de importancia histórica a un espacio en abandono, ocupado por personas en situación de calle. Este lugar hoy se encuentra sumido en el deterioro.
Históricamente, el Portal de Valderrama ha sido testigo de varios momentos clave. En el periodo de la independencia, Ignacio Pérez utilizó este lugar para obtener un caballo sin autorización, con el fin de llevar el mensaje crucial de doña Josefa Ortiz de Domínguez a Ignacio Allende.
Así lo dio a conocer Manuel Valderrama, historiador por la Universidad Autónoma de Querétaro, quien detalló que este mensaje alertó sobre la traición descubierta en la conspiración independentista. Además, el portal fue el escenario de la fotografía del transporte del Emperador Maximiliano al Cerro de las Campanas, donde fue ejecutado.
El Portal de Valderrama también está asociado con una leyenda local conocida como “El Sereno sin Cabeza”, narrada por J. Guadalupe Ramírez Álvarez, primer cronista oficial del Estado y fundador de Diario de Querétaro. Esta leyenda ha sido parte integral del folklore local y refleja el impacto cultural que el lugar ha tenido en la región.
En el siglo XVIII, el Portal de Valderrama estaba situado en un área de relevancia arquitectónica y social. Durante ese periodo, se llevaron a cabo importantes construcciones, entre ellas las casas reales o de Cabildo y la Escuela de Primeras Letras y Academia de San Fernando, que fue finalizada en julio de 1804.
Esto comentado por Andrés Garrido del Toral, quien en sus registros detalló que la construcción de las casas reales se realizó entre 1766 y 1770 bajo el mandato del corregidor José de la Rocha. Este proyecto fue parte de un acuerdo con el rey de España, en el que se ofreció la construcción a cambio de una extensión en el mandato del corregidor.
Las casas reales se construyeron en un terreno previamente baldío propiedad de un indígena, lo que marcó el comienzo de una importante reconfiguración urbana.
Aunque antes existían edificaciones similares en la zona, estas estaban en mal estado. La construcción de las nuevas casas reales facilitó la remodelación de las edificaciones cercanas y promovió la revitalización de la plaza, que había sido un espacio preferido por la aristocracia.
Esta renovación no solo subrayó el carácter político de la plaza, sino que también ayudó a integrar la zona con el convento de La Cruz, consolidando su importancia dentro del contexto urbano de la ciudad.
El contraste entre la relevancia histórica del Portal de Valderrama y su estado actual resalta las dificultades que enfrenta en términos de preservación.
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El sitio, que alguna vez fue un centro neurálgico de eventos históricos y culturales, está ahora en desuso y en deterioro. La ocupación por personas en situación de calle y el deterioro físico del lugar plantean importantes preguntas sobre la preservación y el mantenimiento de espacios históricos en la región.
El Portal de Valderrama, con su rica historia y su papel en eventos clave de Querétaro, ahora enfrenta el desafío de reconciliar su legado con su presente deteriorado. La situación actual del lugar refleja las dificultades inherentes a la conservación de sitios históricos, mientras que su pasado sigue siendo un testimonio de su relevancia en la historia de la ciudad.
