Historias peregrinas | Tras 32 años de peregrino, ahora es jefe de columna
Alberto Sandoval, un veterano de 32 años en la peregrinación a la Basílica de Guadalupe, ha asumido por segundo año consecutivo el papel de jefe de columna, liderando y organizando a cientos de peregrinos en esta devota tradición que une a la comunidad queretana.
Desde que tenía seis años, Sandoval ha sido parte de esta peregrinación, una tradición que le fue inculcada por su padre.
“Mi papá me trajeron de seis años. Aún se hacían los bastones, los sirgos, los capotitos de petate donde uno se dormía y con eso se cubría uno de agua”, recuerda con nostalgia. Ahora, como jefe de columna, lleva la Santa Cruz y guía a los peregrinos con dedicación y responsabilidad.
El papel de Sandoval como jefe de columna no es solo simbólico, sino que requiere una organización meticulosa y un compromiso constante.
“Somos 480 jefes para controlar la peregrinación, que somos como 35 mil los que vamos a salir. No es difícil. Todos nos cansamos en este camino, pero son cansados gozosos”, comentó.
Su labor incluye asistir a juntas, coordinar a los peregrinos y mantener el orden durante el trayecto, asegurando que todos sigan las indicaciones y el espíritu de la peregrinación.
La peregrinación no es solo una cuestión de fe, sino también de comunidad y tradición. “Nos traen desde chiquitos y nos han inculcado este don, y es un don, porque seguimos a la madre santísima y todos, les digo, vamos a trabajar en equipo”, afirmó Sandoval.
Sandoval destaca la importancia de la continuidad generacional en esta tradición. “Tengo mis hijos, pero van en sus respectivos grupos. Voy con mis auxiliares de columna”, explicó. La peregrinación no solo es una oportunidad para demostrar su fe, sino también para inculcar valores y tradiciones en las nuevas generaciones.
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A pesar de los desafíos, Sandoval se siente orgulloso de su rol y de la responsabilidad que conlleva. “Es mucha responsabilidad, hay que ir a las juntas, caminar por aquí, correr por allá. Sí se trabaja, es mucho para cuatro personas. Hay que ordenar lo más que se pueda, que es parte de nuestro trabajo”, señaló.
